El Aleph de Borges era un McDonnals

Estaba cenando con Enrique en un restaurante japonés. Podría estar en Tokio y ser una neo-Scarlett Johansson morena rodando Lost in translation . O podría estar en Madrid y ser yo, crítica fiel de las últimas novedades legislativas de vlex. Fuese quien fuese, allí estaba, siendo infinitas personas en el neo-Aleph de Jorge Luis Borges, en un no-lugar, en un restau que podría estar situado en cualquier ciudad del mundo. Pues, como todo el mundo sabe, un restaurante japonés en Madrid es un restaurante japonés en Berlín. Lo que es, a su vez, un restaurante japonés en el corazón de Londres, de Ciudad del Cabo o de Macao. Presente, pasado y futuro en infinitos lugares clonados. Visto uno, vistos todos . - ¿Crees que eres un ciudadano del mundo?- le pregunté, de repente. Enrique sonrió. Es un hombre de recursos. - Si crees que eres un ciudadano del mundo eres un ciudadano de ninguna parte. Fruncí el ceño. Soy joven pero no tonta. Y además me leo el periódico todos los días. - ...