Camiseta y toda la puta parafernalia.

Pat guardaba silencio mientras miraba distraídamente el partido. ¡Goooooooooooooooooooooool! Todos los aficionados se levantaron, coloreando el cielo con gritos de júbilo. Ella se levantó y, escondida entre la multitud, salió de las gradas y llamó a Bel. -¿Sí? -Bel. -¿Has ido, no? -Sí-dijo Pat bajito, sintiéndose muy pequeña. -¿Le has visto? -Claro. -¿Y a ella? ¿A ella la has visto? -Estaba animándole. Ya sabes. Camiseta y toda la puta parafernalia. -¿Y estás bien? Pat guardó silencio. -Estoy aquí. Estoy fatal . Él se ha olvidado de mí. -¿Y te quejas? Le mandaste a tomar por culo el verano pasado. Lo mínimo que ha hecho ha sido superarlo. No como tú. -Me da igual, voy a recuperarle . Alguien carraspea al otro lado. -¿No me ibas ni a saludar?